Bruselas con Valcarcel - Ucomur

La economía social murciana es protagonista en el Parlamento Europeo

El presidente Ramón Luis Valcárcel y Juan Antonio Pedreño participaron en una jornada para impulsar políticas de desarrollo de este modelo empresarial en la UE

 

El presidente de la Comunidad, Ramón Luis Valcárcel, y el presidente de la Confederación Empresarial Española de la Economía Social (Cepes), Juan Antonio Pedreño, participaron el 30 de mayo en la sede en Bruselas del Parlamento Europeo en una jornada organizada por el Intergrupo de Economía Social.

Con el título ‘La Economía Social en los estados miembros, ¿cuál es el valor añadido de la Unión Europea?’, el foro internacional estaba dirigido a exponer iniciativas de los distintos países en el ámbito de este modelo empresarial y el papel que la Unión Europea puede desempeñar para favorecer su desarrollo a nivel sectorial.

El jefe de Ejecutivo murciano y vicepresidente primero del Comité de las Regiones (CDR) se encargó de la ponencia principal de la jornada, en la que reclamó a la UE que tome posiciones y se defina a favor de una legislación más “uniforme y homogénea” respecto a las empresas de economía social, como respuesta a aquellos estados miembros y regiones europeas donde la regulación del sector se encuentra “compartimentada” entre diferentes normativas y ministerios.

Valcárcel defendió que la normativa europea relativa a este modelo empresarial aborde también, “y cuanto antes”, diversos aspectos que van desde incentivos a reformas en materia fiscal o laboral. “Se trata, -señaló-, de que la propia Comisión Europea decida que la economía social es algo mucho más importante de lo que se puede imaginar”.

Por ello, aseguró que es el momento de ofrecer mayores oportunidades y protagonismo a estas empresas, puesto que han demostrado que su modelo es capaz de soportar los efectos de la crisis, así como que depende menos del ciclo empresarial y proporciona servicios que requieren un uso intensivo de la mano de obra y que son socialmente útiles.

En el caso de la Región, destacó la comunión existente entre los poderes públicos, “y muy especialmente el Gobierno regional”, y la economía social, que ha significado “un paso de gigante”, tanto en lo cuantitativo como lo cualitativo, por el que Murcia ha pasado de ser una comunidad prácticamente “fuera de cualquier mapa de la economía social” a constituir todo un referente dentro y fuera de España.

Valcárcel anunció, asimismo, la elaboración de un segundo Plan regional de Economía Social como respuesta a la petición realizada el pasado 28 de mayo por Juan Antonio Pedreño, en una reunión celebrada en el Palacio de San Esteban.

El presidente de la Comunidad destacó el gran crecimiento en empleo, empresas, prestigio y consolidación de la economía social en la Región, así como los avances conseguidos en materia legislativa a partir del “acuerdo pactado” entre la Administración regional y el sector.

Aseguró que a través de este modelo empresarial, que aporta valores y principios, las personas que se hallan fuera del mercado de trabajo “pueden mejorar sus expectativas de encontrar empleo, y las personas de bajos ingresos pueden mejorar su calidad de vida”.

“Es hora de brindar cada vez más protagonismo a fórmulas empresariales que potencien el empleo local; a iniciativas que apuesten por la inclusión de quienes más dificultades tienen para acceder al mercado de trabajo, y que se sitúen a la vanguardia mostrando un compromiso total con la responsabilidad social corporativa”, remarcó.

En esta línea, puntualizó que se deben impulsar marcos normativos europeos específicos que contribuyan a reconocer la economía social como un actor económico y social muy a tener en cuenta en la definición de políticas públicas de los estados miembros, con reformas en materia de política fiscal, en materia de contratación pública o actuaciones en materia de investigación y creación del conocimiento.
También abogó por que se reconozca en las directrices comunitarias para el empleo la importancia que las empresas de economía social ofrecen como fuente importante de creación de empleo estable y de calidad.

Dentro de la UE, -indicó-, miles de personas han elegido ya estos principios de corresponsabilidad y de solidaridad para llevar a cabo su actividad laboral, de forma que alrededor de nueve millones de personas trabajan en la economía social, es decir, uno de cada cinco europeos pertenece a una entidad de este tipo, y seis de los estados miembros cuentan con ministros responsables de economía social.

El presidente de Cepes, Juan Antonio Pedreño, participó en una mesa redonda con representantes de organizaciones de Portugal, Bélgica,

Francia y Suecia en la que expuso la Ley 5/2011 de Economía Social española. Pedreño destacó que la normativa ha supuesto “un hito sin precedentes” para un sector que genera empleo por encima de otros modelos de empresas, así como que la aprobación por unanimidad de todos los grupos parlamentarios refleja la “sensibilidad política y social que sitúa al sector en el lugar que se merece”.

La ley española no modifica la normativa vigente de cada una de las entidades que conforma el sector y aporta un marco jurídico que da “mayor seguridad, reconocimiento y visibilidad” a esta fórmula jurídica. Así, define por primera vez el concepto jurídico de economía social y los modelos de empresa que forman parte de ella: cooperativas, mutualidades, fundaciones, asociaciones que lleven a cabo actividad económica, sociedades laborales, empresas de inserción, centros especiales de empleo, cofradías de pescadores, sociedades agrarias de transformación y entidades singulares.

La ley reconoce como tarea de interés general “la promoción, estímulo y desarrollo de las entidades de la economía social y de sus organizaciones representativas”, lo que obliga a los poderes públicos, entre otras acciones, a “remover los obstáculos que impidan el inicio y desarrollo de una actividad económica de las entidades de la economía social”.

El presidente de la patronal destacó que la normativa es un instrumento “que refuerza la pluralidad empresarial que marca la Estrategia UE 2020” y animó a los Estados miembros a desarrollar iniciativas similares que consoliden el importante papel que juegan este tipo de empresas. Anteriormente, ya presentó la legislación española en países como México y Francia.

El vicepresidente del Intergrupo de Economía Social del Parlamento Europeo, Sven Giegol como respuesta a la presentación de Pedreño, resaltó que la ley española puede servir “como una excelente referencia para el desarrollo de la economía social europea”.

Los copresidentes, Marc Tarabllea y Mario Mauro, expusieron en su intervención el significativo papel que juega la economía social europea y los avances que se están produciendo. Ambos remarcaron la necesidad de generar un enfoque productivo del sector en cada uno de los estados miembros y poner en marcha un aprendizaje para animar a las regiones y estados miembros a que potencien este modelo de empresa.

Gran peso en la UE.

La Comisión Europea, a través del comisario de Mercado Interior, Michel Barnier, señaló recientemente que la economía social representa entre el 15% y el 17% del PIB y el empleo en Europa. A este mensaje se ha unido la recomendación del comisario de Empleo, Laszlo Andor, de que España potencie la economía social como parte de la estrategia para reducir los niveles de desempleo, junto a una mayor inversión en educación y poner fin a la economía sumergida.

“España puede usar mejor su capacidad para desarrollar la economía social”, sostuvo, y citó el caso del País Vasco como “buen ejemplo” para mantener unos mejores niveles de vida y evitar el desempleo.